Solo la luna, fue lo único que alumbró mi camino, que me levantó de mi soledad, aunque cubriendome mas con mi sombra, pudo hacerme ver una sola luz, que prolongó mi camino y me hizo perderme cada vez menos en mí, que me dió una única felicidad, tan pasajera como las estrellas que ve en su camino, y que me pudo contar de el lazo entre su soledad y la mia, pero que como al sol que esperaba, nuestras vidas estaban del otro lado y sin oportunidad de durar mas de una noche.
Sin razón; sin ser... la luna me abandonó, fue solo un intento por aprender lo fiel de la soledad, pero en mí dejo plantadas mas dudas, sobre si me mentía, o me traicionó, por murmullos en mis pensamientos, y la inseguridad de mis pasos, que a diario me han cosechado rechazo y celos.
Jamás algo que empeze mal, podré recuperar una maldita casilla, que me brinque, que ignoré solo por un segundo, y que me ha costado ver mi sangre esparcirse por todos lados a donde voy.